“Tu libertad y tu felicidad la definen tus acciones, la clave está en la respuesta que des a tus circunstancias y emociones. Disciplina, lucha y compromiso.”

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Educar en autonomía: 5 años

Querida Mercedes…

“¿Qué le puedo pedir a mi niño de 5 años?”

La autonomía es un pilar fundamental para la felicidad de nuestro hijo, es la base de la autoestima, ya que, si se siente capaz de hacer algo por sí sólo, crecerá en seguridad personal y afrontará las situaciones, difíciles o fáciles, con tranquilidad y seguridad, lo que generará mayor probabilidad de éxito. Así mismo, también ayuda en la relación con tu hijo porque le estas otorgando la confianza para hacer algo que le supone un reto, el mensaje que le darás a tu hijo será: “yo creo en ti, en que puedes hacerlo”.

Cuando educas en autonomía enseñas a tu hijo a aprender de los errores, y le haces comprender que aunque lo haga bien o mal, valorarás su esfuerzo igualmente. También se te hará más fácil la tarea de educar, tendrás mayor libertad como padre o madre, porque descubres que tu hijo puede ayudarte en tareas, aunque sean pequeñas. En fin, desde el punto que lo mires, hay beneficio para todos.

Los 5 años es una edad en la que podemos empezar a pedirles ciertas cosas de más dificultad, sin dejar de tener en cuenta que son niños. 

A esta edad los niños sienten más curiosidad, y es normal que empiecen a preguntarse sobre el funcionamiento de su entorno y de sus emociones, de esta forma logran comprender ciertas situaciones. Así como en edades anteriores son más rebeldes, en esta época su comportamiento mejora y lo normal es que sean más obedientes y respetuosos, aunque no podemos generalizar, dependerá del niño, de su temperamento y de sus circunstancias.

A la hora de comer…

  • Ya come de todo, aunque habrá cosas que no le gusten.
  • Puede colaborar a poner la mesa, colocando el pan, los vasos y los cubiertos.
  • Lleva su plato al fregadero.
  • Come en un tiempo prudencial, sin necesidad de supervisión constante de un adulto.
  • Bebe agua sin derramarla
  • Abre un yogurt sin problemas, y puede echarse el azúcar con cuidado, lo mezcla con la cuchara.
  • En los restaurantes, le cuesta estar toda la comida sentado, aunque si se le permite levantarse en algún momento, le será más fácil mantenerse sentado y finalizar la comida sin incidentes. 

A la hora de vestirse o desvestirse…

  • Se desviste solo para bañarse o cambiarse de ropa.
  • Se pone el pijama solo.
  • Aprende a abrocharse los botones de la parte de arriba.
  • Se viste completamente cuando hay tiempo. Si vais más justos de tiempo, se pone las partes más sencilla, como camiseta, calzoncillos/braguitas y pantalones.
  • Puede poner la ropa sucia en el cesto de ropa sucia.

En la higiene…

  • Puede empezar a ducharse solo, con el adulto presente. Puedes enseñarle a ponerse el jabón desde el cuello hasta los pies, e irle diciendo cada parte del cuerpo mientras se pone el jabón. 
  • Se lava los dientes solo cuando se le recuerda

Autonomía emocional…

  • Juega en su cuarto durante al menos 1 hora.
  • Se queda a dormir en casa de familiares y conocidos sin ningún problema
  • Puede irse de colonias
  • Empieza a enfrentarse a sus miedos gradualmente.

Responsabilidades

  • Sabe su dirección y un teléfono.
  • Con previa explicación, sabe lo que debe hacer si se pierde.
  • Recoge sus juguetes sin ayuda, pero le gusta que lo miren cuando lo hace bien.
  • Coloca su mochila en la puerta para recogerla por la mañana cuando va al cole, aunque necesitan que se lo recuerdes.
  • Sabe aceptar consecuencias de conductas inadecuadas
  • Aprende a abrocharse los cordones de los zapatos, y quiere enseñárselo a todo su entorno.
  • Puede ayudar  a hacer una ensalada, colocando los ingredientes en el plato.
  • Empieza a tomar decisiones si se le delimitan las elecciones, como por ejemplo, decide si quiere bocadillo de queso o de jamón. Intentar que sea consecuente con lo que decida, sin permitirle cambiar la elección una vez tomada, de esta forma le enseñas a pensar bien su decisión final.  

Te invito a que con lápiz marques las cosas que hace tu niño o niña de 5 años, y, las que no hace todavía, enséñaselas de una en una, dejando un margen de aprendizaje de al menos una semana para que adquiera el hábito. No te olvides de reforzar cada paso, aunque sea muy pequeño, y si avanza, refuerza cuando se ha esforzado, verás que con esto bastará para lograrlo.

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